Los avances científicos han conseguido cambiar, en los últimos tiempos, la concepción del ser humano en su conjunto. Desde hace 250 años, sabemos que en nuestro cuerpo habita todo un cosmos de microorganismos que hoy conocemos como microbiota, formado por bacterias, arqueas, protozoos, hongos, levaduras y virus, que nos acompañan desde el mismo momento en el que nacemos.
Esta ‘comunidad de vecinos’ con la que convivimos, lejos de ser discreta y ajena a nuestro día a día, interactúa con nuestro cuerpo, en una increíble relación de simbiosis que alcanza cifras espectaculares, dado que tenemos 1,3 bacterias por cada célula humana.
La investigación médica ha avanzado mucho en las últimas décadas con el fin de entender cuál es el papel de la microbiota en nuestra salud, descubriendo las implicaciones que tiene en muchas de las patologías que afectan a las poblaciones occidentales actuales, como la obesidad, la diabetes, las enfermedades inflamatorias intestinales o las que tienen un origen autoinmune.
Sobre esa relación entre la microbiota y las enfermedades más comunes en la actualidad y sobre la importancia de mantener en equilibrio los microbios que nos habitan hablarán el próximo 16 de febrero, en el Hospital Universitario de Torrejón, las doctoras Sari Arponen, internista en este centro, y Silvia Gómez Senent, responsable de la Unidad de Trastornos Funcionales Digestivos en el Hospital Universitario de La Paz.
El centro hospitalario, consciente de la importancia de que los pacientes conozcan más sobre la microbiota, esa gran aliada de su salud a la que muchas veces no se le presta la atención que merece, abre sus puertas para albergar esta charla, organizada por el prestigioso laboratorio italiano Bromatech, productor de probióticos de cuarta generación, y por su distribuidora oficial en España, Nutribiótica. La conferencia, que se desarrollará de 10.00 a 14.00 horas, está pensada para todo tipo de perfiles, desde las personas que sufren alguna dolencia hasta los individuos sanos que quieren saber más sobre sus microbios y sobre cómo cuidarlos.
La asistencia a la misma es gratuita e incluye una pausa-café ofrecida por Bromatech, aunque es obligatorio inscribirse previamente, rellenando el formulario disponible en la página web de Nutribiótica
Más allá del intestino
Una de las cuestiones que podrán descubrir aquellos que acudan a la charla es que la microbiota no solo se localiza en el intestino, sino que también se encuentra «en la piel, en el tracto genitourinario, en la cavidad bucal…», explica la doctora Arponen. Su equilibrio es básico para mantener un buen estado de salud, ya que «la alteración de la flora, sobre todo motivada por nuestro estilo de vida, puede hacer que aparezcan determinadas enfermedades», sostiene la médico.
Esta situación de desequilibrio de los microorganismos que forman parte de nuestra microbiota intestinal se denomina disbiosis y afecta a su función y a su correcta distribución en el intestino. Algunos de los síntomas que sienten aquellos que la padecen son las continuas flatulencias, la lengua blanca, la aparición de algunas alergias o intolerancias alimentarias, el estreñimiento o las infecciones vaginales de repetición, entre muchas otras. Entre las causas, destacan las que tienen que ver, tal y como afirma la doctora Arponen, con nuestras rutinas actuales: dietas desequilibradas, estrés, un uso demasiado generalizado de los antibióticos o el exceso de higiene.
Esta disbiosis, que está detrás de muchas dolencias del aparato gastrointestinal, como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa o el Síndrome del Intestino Irritable (SII), se ve complementada por daños y problemas en la membrana o barrera intestinal, «que es uno de los sistemas más eficientes y a la vez complejos de nuestras defensas frente a las agresiones externas», sostiene Gómez Senent. El daño en la barrera intestinal provoca que pasen a la sangre determinadas sustancias, lo que, de nuevo, conduce a la aparición de un amplio abanico de patologías de diversa índole. A eso se le llama hiperpermeabilidad intestinal.
Prevenir, mejor que curar
La doctora Sari Arponen insiste en que «es imprescindible que el paciente entienda por qué la microbiota es importante, qué cosas son las que le afectan y qué supone su alteración». La profesional ofrecerá en la segunda parte de la charla abierta al público una visión integradora de cómo podemos cuidarla, con el objetivo de prevenir enfermedades «y mantener una salud óptima».
Una buena alimentación, hábitos de vida equilibrados, practicar deporte con frecuencia y el consumo de probióticos con cepas específicas de derivación humana por vía oral son algunas de sus recomendaciones, que detallará con más profundidad el próximo 16 de febrero.