- Las sesiones de musicoterapia reducen la ansiedad y el estrés, generando un ambiente positivo durante su estancia en la unidad
- La iniciativa tiene lugar todos los viernes en la Unidad de Cuidados Intensivos, creando un momento de conexión entre los profesionales sanitarios y los pacientes
Numerosas investigaciones y estudios respaldan la idea de que el estado anímico es un factor fundamental en la recuperación de los pacientes con diferentes patologías. El arte, y en especial la música, desempeña un papel crucial en la salud, ya que permite reducir el estrés, mejora el estado de ánimo, estimula la cognición y ofrece apoyo terapéutico en diversas condiciones. El Hospital Universitario de Torrejón, perteneciente a la red pública de la Comunidad de Madrid, comprueba cada viernes cómo sus pacientes de la Unidad de Cuidados Intensivos se benefician de los efectos de su programa de musicoterapia.
Desde hace más de cinco años, el centro torrejonero puso en marcha esta iniciativa en colaboración con la Fundación Diversión Solidaria para utilizar la música como herramienta no farmacológica y mejorar el bienestar físico y emocional de sus pacientes y familiares de media y larga estancia. El programa de musicoterapia forma parte del proyecto HUCI, Humanizando los Cuidados Intensivos, y tiene un notable efecto positivo: “No solo influye en su recuperación, sino que la mejora considerablemente”, explica Conchi Faura, Supervisora de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Torrejón.
“Se ha demostrado que estas intervenciones reducen la ansiedad y el estrés, generando un ambiente positivo durante su estancia en una unidad, a priori, tan hostil como la UCI para la población general”, argumenta la supervisora del servicio. Gracias al programa de Salud Responsable del centro torrejonero, que busca cuidar de la salud y el bienestar de los pacientes, Aránzazu Benítez y Javier Alcántara, musicoterapeutas de la Fundación Diversión Solidaria, acuden al centro torrejonero cada viernes para deleitar a los pacientes con su música durante más de hora y media.
“En Diversión Solidaria, llevamos muchos años constatando que las emociones positivas y el ocio terapéutico no curan, pero ayudan a sanar, mejorando los niveles de ansiedad y dolor en diferentes pacientes ingresados en la UCI”, explica María Parra, Directora General de la Fundación Diversión Solidaria. “Estas sesiones tienen beneficios en el estado de ánimo no solo de los pacientes, también en el de sus familiares y en todo el equipo de profesionales sanitarios que trabajan en la unidad. La música les ayuda a gestionar sus emociones y se transforma en una nueva vía de expresión” añade.
Estas actividades terapéuticas gracias a la música se convierten en “un momento de conexión entre los profesionales sanitarios y los pacientes, en el que dejamos la parte instrumental y tecnificada para centrarnos en su faceta emocional”, concluye Conchi Faura, supervisora de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Torrejón.